1903-1981 | Chile
Jorge Urrutia Blondel, nacido el 17 de septiembre de 1905 en La Serena y fallecido el 5 de julio de 1981, trazó una destacada trayectoria en la música chilena. Inició su educación en el Instituto Nacional de Santiago y posteriormente incursionó en la carrera de Derecho en la Universidad de Chile, aunque su pasión por la música lo llevó a dedicarse también a su estudio.
Simultáneamente, se formó en teoría musical, solfeo y piano con varios profesores destacados, entre ellos Blanca Boussac, Raúl Hügel, Andrés Steinfort, Fernando Garda Oldini y Pedro Humberto Allende, período en el que también compuso sus primeras obras musicales.
En 1924 se unió a la Sociedad Bach, donde conoció a Domingo Santa Cruz. En 1928, asumió como secretario del Conservatorio Nacional y obtuvo una beca estatal para estudios superiores de composición en Europa. En París, fue discípulo de renombrados músicos como Paul Dukas, Vincent d’Indy, Charles Kocchlin y Nadia Boulanger. Luego, continuó su formación en Berlín bajo la tutela de Hans Mersmann, Gustav Bumcke y Paul Hindemith.
En el ámbito académico, comenzó como profesor de Armonía en el Conservatorio Nacional de la Universidad de Chile y más tarde impartió clases de composición. En la década de 1960, asumió como jefe investigador en el Instituto de Investigaciones Musicales de la Facultad de Ciencias y Artes Musicales, sucediendo a Eugenio Pereira Salas.
En reconocimiento a su valioso aporte, recibió el prestigioso Premio Nacional de Arte en la categoría de Música en 1976. Durante casi cinco décadas, desempeñó roles importantes en la Universidad de Chile, dejando una marca indeleble en la educación musical del país.
Destacó como coautor de Historia de la música en Chile, obra realizada junto al investigador Samuel Claro Valdés. Entre sus composiciones, se destaca especialmente Pastoral de Alhué, una pieza significativa en memoria de Maurice Ravel, que permanece como uno de sus legados más recordados en la música chilena.